LAURA BALDE, MEMORIA Y ACTIVISMO EN ARGANA ALTA

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BIO Y ENLACE

La Asociación de Mujeres y Feminidades Negras, Africanas y/o Afrodescendientes nacidas o residentes en el Archipiélago Canario surge en 2021 y cuentan con presencia tanto en las islas de Lanzarote, Fuerteventura, Tenerife y Gran Canaria.

Centrada en los feminismos negros, el antirracismo y el anticolonialismo, la asociación abraza y celebra su herencia cultural, sus tránsitos en el mundo, espiritualidades, deseos y afectos, desde la condición isleña y de Archipiélago a través del cuidado comunitario.

Sus objetivos incluyen el empoderamiento de las mujeres africanas y afrodescendientes, la promoción de la producción cultural de la comunidad, el fomento del encuentro comunitario en el archipiélago, la visibilización y el apoyo al emprendimiento y la autogestión, así como la organización de eventos socioculturales que celebren y den visibilidad a la afrodescendencia y la africanidad.

Además, la asociación se compromete a proveer herramientas antirracistas a instituciones, asociaciones y entidades que lo requieran, con el objetivo de contribuir a la construcción de una sociedad más inclusiva y justa para todas las personas en las Islas Canarias. Son las creadoras del Mamiwata Fest Canarias.

Mujeres afro en canarias

Mujeresafroencanarias.wordpress.com

Laura Balde Ejjar

proceso

Laura Balde Ejjar, activista antirracista y artista de Lanzarote, es cofundadora de la Asociación de Mujeres Africanas y Afrodescendientes de Canarias. Vive en Argana Alta, el barrio con mayor número de habitantes de Arrecife y que sufre, desde hace años, el olvido de las instituciones locales. 

La labor de Laura  no termina aquí. Ha impartido talleres de feminismo negro y activismo antirracista en diversos centros educativos y milita en CNAAE (Comunidad Negra Africana Afrodescendiente de España -en Canarias- y a través de su labor en otras organizaciones apoya  a migrantes y mujeres inmigrantes vulnerables. 

Como ya era conocida por nuestra organización por su labor y entusiasta participación en otros proyectos, supimos que teníamos que contar con ella. Como vecina de Argana Alta, este equipo estaba seguro de que su aportación sería muy valiosa y con una perspectiva muy personal.

No hizo falta más que una llamada telefónica y una breve explicación para que nos dijera que sí. Sus vivencias como  adolescente y joven racializada en Argana marcarían la ruta escogida.

experiencia

El 10 de diciembre quedamos con Laura.  Los lugares que nos va a enseñar ya los tiene decididos.  Todos están relacionados con su época más joven y también con la maternidad, y es que ahora lleva a jugar a su pequeña a los mismos parques en los que ella se reunía con sus amigas, muchas de ellas también madres.  Nos habla de la diversidad de nacionalidades y culturas que se entremezclan en Argana.  Este será un encuentro para el recuerdo y la denuncia por el abandono de espacios comunitarios.

Recorriendo el parque de Argana Alta junto al centro sociocultural del barrio, rememora su adolescencia en un entorno carente de actividades y atención adecuada para la gente más joven. Laura reconoce los desafíos que enfrenta la juventud del barrio, así como la ausencia de recursos y oportunidades para su desarrollo.  

Del mismo modo, las personas mayores  se ven desplazadas de los que eran sus sitios habituales. En otra pequeña plaza arbolada con grandes palmeras que además hace las veces de rotonda, junto a la calle Tanganillo,  Laura nos cuenta que hace poco tiempo hubo un par de bancos donde las gente más  mayor se reunía y se resguardaba a la sombra  en los en los días de más calor, pero las instituciones locales los retiraron perdiendo así este espacio de ocio, encuentro  e interacción comunitaria.

Nos trasladamos a continuación al parque Rodríguez de la Fuente, en el barrio de Titerroy cercano a Argana. Encontramos un lugar que bien podría dedicarse al ocio y deporte al aire libre entre otras,  un sitio de esparcimiento para menores y mayores, con una plantación de pinos muy extensa poco habitual en la isla.  Pero la falta de cuidado y mantenimiento lo convierte en un espacio olvidado e infrautilizado cuando bien dinamizado podría ser un lugar de reunión y participación ciudadana.   Aquí Laura recuerda como preparaba coreografías con sus amistades y pasaban las tardes ensayando bailes.

A pesar de los obstáculos, valora la fortaleza de las amistades duraderas y admira a las madres de la comunidad que enfrentan las adversidades. Sin embargo, también señala la realidad de las dificultades y carencias que persisten en Argana Alta, desde la falta de actividades recreativas hasta la escasez de determinados servicios.

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